jueves, 26 de julio de 2012
Los nuevos conspiradores
Hay historiadores muy serios en Bolivia que creen que existe una
conspiración internacional contra el país que lo ha conducido al
enclaustramiento marítimo. Evidencias no faltan. En 1879, apenas 36 años
después de haber conseguido la Independencia, los chilenos nos
arrebataron la salida al océano Pacífico. Años más tarde, en la Guerra
del Acre, (1899-1903) Brasil se llevó un valioso territorio al norte del
país del que, a través de algunos afluentes, se podía conseguir acceso
al río Amazonas y de ahí al Océano Atlántico. En la Guerra del Chaco
(1932-1935), Bolivia perdió el Chaco Boreal y con él un importante
puerto sobre el río Pilcomayo con posibilidades de navegación hacia la
Cuenca del Plata, el río Paraná y el río de la Plata, desembocadura del
Atlántico frente al puerto de Buenos Aires. Todas estas pérdidas
territoriales, además de haber servido para alimentar el gran lamento y
excusas nacionales, no nos han dejado valorar lo que tenemos y que
podemos aprovechar con gran ventaja. Por si no lo saben muchos
bolivianos, el país sigue teniendo salida al mar, gracias al empuje de
un empresario privado de gran visión que creó Puerto Aguirre. Resulta
que un gobierno “soberano, patriota y que defiende el interés nacional”
le hace la guerra a este puerto y con ello se suma a la lista de los
conspiradores de los que hablan esos entendidos en historia.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario